Como la vida misma, el tiempo también puede cambiar en cuestión de minutos, y pasar del sol más radiante a una lluvia intensa y sin tregua para que puedas llegar a casa. Si te ha pillado por sorpresa y no llevabas el paraguas encima, ¡aquí van algunos consejos para saber qué hacer tras mojarse!
Antes de contarte los trucos que te serán útiles para evitar que tú o tus peques cojáis un resfriado, hay que aclarar si realmente la lluvia tiene el poder de enfermarnos.
La respuesta directa es que no, ya que se trata simplemente de agua, y lo mismo sucede con las temperaturas frías, cuya gran habilidad es solo la de obligarnos a sacar los abrigos del armario y el resto de complementos para no helarnos.
Lo que sucede es que si se nos moja la ropa, se genera humedad. Además, quizás conozcas la desagradable sensación de sentir cómo se van enfriando las prendas pegadas a nuestra piel. Es aquí cuando nuestro sistema inmunitario tendrá que hacer el esfuerzo de regular la temperatura, y esto puede hacer que en determinadas personas se debilite y quede expuesta a patógenos, haciendo que el resfriado o la gripe llamen a tu puerta.
Por otra parte, los cambios de temperatura también son habituales cuando tenemos este clima. Al acceder a espacios de interior y luego volver a salir, estamos retando al organismo. Por no hablar de que cuando todos acudimos al mismo refugio huyendo de la lluvia, se multiplica el riesgo de enfermedad, porque nos exponemos a virus y bacterias en un lugar cerrado.
Con lo dicho, la finalidad de estos consejos para saber qué hacer tras mojarse es evitar que esa humedad nos enfríe y recuperar lo antes posible la temperatura normal del cuerpo. ¡Verás que son más sencillos de lo que piensas!
Imagina la situación. Llegas a casa con el pantalón un poco mojado porque, por suerte, tenías la chaqueta y conseguiste mantener la camisa bastante seca. Ahora toca seguir con las actividades del día a día, y con algo más de prisa porque con la lluvia te has liado un poco. ¿Quitarte la ropa? Ya lo harás cuando llegues a la ducha. ¡Error!
Como te decíamos, la ropa mojada provoca humedad y, por poco que sea, tu cuerpo tendrá que regularse para volver a entrar en calor. Si le sumamos el estrés, o que quizás ya había algún virus al acecho, la combinación puede hacer que al día siguiente hayas enfermado.
Una de las propiedades de la multiplicación decía que el orden de los factores no altera el valor del producto. Pues con la cantidad de tareas que tienes que hacer en lo que te queda de día pasa un poco igual; mientras hagas las ochenta cosas pendientes, con qué empiezas primero pasa a ser irrelevante.
Por tanto, antes de ponerte con lo demás, date una ducha con agua caliente y así ayudas a tu organismo a volver a la normalidad. ¡Ya verás qué bien te sienta!
Al final, con estos consejos, vas a desear volver a mojarte en la calle para poder dedicarte todos estos minutos de relax. Porque la siguiente tarea para regular tu temperatura y darle un empujoncito al sistema inmune es beber algo caliente. Además, si las mucosas se te habían irritado, te ayudará a despejarlas. Una infusión, un chocolate, un té, una sopa… Eso lo dejamos a tu elección.
Una alternativa a las actividades relajantes que te hemos mencionado sobre qué hacer tras mojarse es apostar por otras más intensas. Por ejemplo, aprovechar para ir al gimnasio o entrenar en casa, si es allí donde ibas. Con ello conseguirás regular la temperatura y estabilizar el flujo sanguíneo. Después, podrás pasar con los consejos anteriores; así aprovechas, ¡y te das el lujo!
Y si quien te preocupa son los peques, puedes ayudar a su organismo con productos naturales que estimulan el sistema inmunitario. Como son las piruletas Inmunochup con própolis y miel de Pharmachups. Con ellas, ayudarás a reforzar su sistema inmunitario y reducirás las posibilidades de que enfermen. ¡Y lo mejor es que son deliciosas!
Con estos prácticos consejos, ¡ya no habrá que temer a la lluvia!
