Y no, no son series que van sobre ser madres o padres, porque de eso ya sabes tú un rato y de lo que se trata es de desconectar. Pero, spoiler: sí que son series protagonizadas por mujeres fuertes y, algunas, escritas también. ¡Allá vamos!
Por lo pronto empezaremos con una serie mega rápida de ver, tanto como que la suma de todos sus capítulos sale a menos de 2 horas: 1,40 h, para ser exactos. O sea, menos de lo que duran las pelis de Nolan y más fácil de entender. Se trata de una serie con 10 capítulos de unos 10 minutos cada uno. Pero es que además es una maravilla de historia de desamor que, como todas, tiene también mucho amor propio. Nadia de Santiago, junto a Alvaro Cervantes, es la protagonista encargada de desnudar su corazón frente a nosotros y emocionarnos. Así que tened pañuelos a mano y a disfrutar del chaparrón.
Si no la has visto, ya estás tardando. Y más si te gustan las series de suspense con policías atormentados por un pasado de aupa. En este caso, el de su protagonista Mare, brillantemente interpretada por Kate Winslet, que siendo detective de un pequeño pueblo de Pensilvania, empezará a investigar un crimen, justo cuando su vida personal y todo su alrededor empieza a desmoronarse poco a poco. Este drama criminal modélico que engancha desde el minuto uno está compuesto por 7 episodios de una hora aprox. El tiempo justo como para ver mientras haces elíptica o te espachurras en el sofá después de cenar. Prometido.
Uf, madre mía, qué genialidad. Y punto. Fleabag es una de las mejores series de la década. Por su protagonista desquiciada, su tono, su formato, sus diálogos y su crudeza a la hora de escupir la realidad hacia el espectador sin tabúes, sin complejos y con mucha, pero que mucha sinceridad. Esta dramedia está formada por 6 episodios de 20 minutos. Un pim pam para una de esas tardes en las que consigues enchufar a los niños en casa de los abus o de cualquier amiguito del cole. Y lo mejor es que tiene dos temporadas, así que te da para dos tardes. ¿Lo peor? pues eso, que solo tiene dos temporadas.
Venga va, una de maternidad, pero al menos que sea diferente y alocada, para que pasar el rato viéndote reflejada en la pantalla no duela tanto. Se trata de la serie de Leticia Dolera en la que nos cuenta la vida de 3 mujeres que, habiendo superado la treintena, están en plena crisis existencial. Una soltera con complejo de Peter Pan, una controladora que, tras una ruptura inesperada comete una locura que traerá como consecuencia una maternidad algo peculiar, y una casada que necesita desconectar. El combo perfecto para una comedia la mar de divertida: dos temporadas, 30 minutos por capítulo, y muchas realidades vitales.
Porque también nos gusta el drama. Es así. Hay historias que nos tocan el corazón y está, sin duda, es una de ellas. Y es que de maternidad va la cosa. Una joven madre decide separarse del padre de su hija, que la maltrata, y ponerse a trabajar de limpiadora haciendo malabares para poder mantener a su hija. Una joyita de miniserie, y no solo por el guión, sino también por los recursos narrativos y la sensibilidad con la que está rodada. Solo os haremos un mini spoiler: preparaos para la escena del sofá.
Este sí que es el descubrimiento de la temporada (aunque es de 2018). Esta serie inglesa es abrumadoramente bonita. Nos cuenta la historia de Bethan, una adolescente que tiene que empezar a lidiar con las inseguridades y la ansiedad de esta etapa vital mientras su entorno familiar se desmorona y ella cuenta una realidad inventada a sus amigos. muchos la definen como una serie oscuramente cómica y no seremos nosotras las que lo contradigamos, la verdad. Pero vedla. Vedla ya, que son solo 5 episodios de 30 minutos y dos temporadas.
Con esto ya tienes 5 planazos estupendos en la cola de reproducción, ahora ya solo te queda encontrar excusas para que te dejen verlos sin interrupciones. Si te faltan ideas pásate por nuestro Instagram @pharmachups que siempre hay buenos consejos, o al menos graciosos, esperándote. ¡Nos vemos en el próximo blog!