Sin embargo, hay algo que es común en todos ellos, y es lo molesta que puede llegar a resultar. Si llevas tiempo arrastrándola, o tus peques no parecen terminar de curarse del último resfriado, aquí te dejamos algunos trucos para deshacerte de ella.
La carraspera en la garganta es esa sensación de sequedad o de aspereza, que nos lleva a intentar aclararla o toser, como si tuviéramos algo atascado que no sale. Puesto que hemos dicho que las causas son múltiples, es muy habitual y prácticamente siempre podemos identificar a alguien que la padece.
Si en esta ocasión eres tú o alguien cercano, queremos transmitirte que aunque parezca un calvario sin solución, ¡la tiene! Y en realidad, no es necesario recurrir a medicamentos o trucos complejos, ya que hay varios remedios caseros que te pueden ayudar a quitártela de encima.
Estas causas suelen estar relacionadas con procesos inflamatorios, y que son, por ejemplo, lo que llamamos un resfriado mal curado, las reacciones alérgicas o la rinitis. Pero, también, nuestros propios hábitos, como respirar por la boca porque tenemos la nariz taponada; forzar la voz, como sucede en los trabajos en los que hay que hablar continuamente; estar expuestos a cambios de temperatura bruscos, cuyo responsable puede ser el aire acondicionado de la oficina, e incluso el estrés, que es causante de una infinidad de afecciones y patologías.
A los adultos nos suele costar acordarnos de beber agua, y en el caso de los peques, simplemente están demasiado ocupados con sus actividades. Acostumbrarnos a llevar siempre agua encima y a tomarla con regularidad en pequeños sorbos es eficaz para mantener la garganta hidratada y reducir el riesgo de irritación.
Sabemos que es difícil de conseguir, porque parece que al carraspear estamos logrando despejar la garganta. Sin embargo, es solo la sensación que nos da, porque lo que sucede es que esta zona está áspera e irritada. Toser solo empeorará la situación.
Una alternativa a beber agua es tomarla en forma de infusión, si tienes claro que fracasarás en este punto. En particular, te recomendamos el eucalipto, que alivia el dolor de garganta, el jengibre y el limón. Estos dos últimos son un clásico en el tratamiento de las vías respiratorias, así que es probable que ya lo sepas. Y para que todo baje mejor, puedes añadirle un poco de miel. Aunque tengas la garganta áspera, al menos estará dulce.
Otra planta muy beneficiosa, porque es antitusiva y antiinflamatoria, es la altea o malvavisco. Puedes tomarla también en infusión, como suplementos, o en forma de piruletas si quien padece la carraspera en la garganta son tus peques. Tosichup está, además, reforzado con miel y limón y tiene sabor a cola, por lo que les encantará.
Lugares como el trabajo, el transporte o la escuela quizás estén fuera de tu control, pero donde sí puedes marcar la diferencia es en casa. Para ello, apuesta por humidificadores de ambiente, con vapores que harán que las mucosas se mantengan húmedas. Si además los peques tienen tendencia a resfriarse o padecen problemas de alergia, también les vendrá bien.
Esto es muy fácil de decir cuando tenemos la nariz despejada, pero si tenemos un resfriado o una gripe, es imposible no levantarse con dolor de garganta e ir carraspeando el resto del día. Los humidificadores te ayudarán con ello, y también hay remedios como poner un trozo de cebolla en la mesilla de noche. ¡No apto para olfatos sensibles! Mientras estés en la calle, hay que taparse la boca si hace frío; así la protegerás para que no se irrite más.
Si tratas la causa de la carraspera y a la vez pones en práctica estos consejos, ¡podrás despedirte de ella!